Un 28 de abril pero en viernes del año de 1967 el heroico pugilista Muhammad Ali se negó al reclutamiento del ejército para la controversial guerra de Vietnam e inmediatamente se le retiró su licencia para pelear. Cassius Marcellus Clay cambió su nombre en 1964 después de cambiar de religión y renunciar a su nombre de esclavo, tomando como nuevo nombre el de Muhammad Ali.
Había demostrado sus cualidades como gran boxeador desde joven, obteniendo el oro olímpico en 1960 con tan sólo 20 años; sin embargo, esta presea duró poco en sus vitrinas. ¿La causa? sus controversiales declaraciones respecto a la guerra contra el Vietcong, aunado a su negativa de ser reclutado.
Desde 1965 tuvo su primer intento de reclutamiento; sin embargo, su calificación fue de 1-Y, debido a que no pasó el Test de Índice de Inteligencia. Dos años después de la primera calificación para ingresar al Ejército, esta fue cambiada por un 1-A, por lo que quedó declarado apto para ingresar a las Fuerzas Armadas. Durante 1966, tras alegar que razones de conciencia le impedían ingresar al ejército, logró un poco más de tiempo y pudo seguir combatiendo en el ring. Aunque públicamente se mostró contrario a la guerra de forma abierta:
-No tengo nada contra los Vietcongs
–dijo en uno de los tantos reportajes que le hicieron.
El 28 de abril de 1967 se presentó en un viejo edificio de Correos en Houston, Texas, junto a otros 11 convocados por el Ejército. Cuando lo llamaron por su nombre original, no dio respuesta alguna. Y se negó a dar un paso al frente cuando fue convocado por Muhammad Ali. Un oficial le pidió que lo acompañara, obedeció y en otro despacho, escuchó atentamente la advertencia de las consecuencias de su actitud. Le hicieron saber que podía ser condenado por desertor.
Cuando por segunda vez le dieron la oportunidad de aceptar su reclutamiento, volvió a negarse y firmó una declaración al efecto. Ese mismo día, la Comisión Atlética de Nueva York decidió desconocerlo como campeón del mundo de los pesos completos y le quitó la licencia de boxeador profesional. La bomba había estallado. Otros estados se fueron sumando a esa medida.