Francia.
Ha sido un país que ha tenido constantes transformaciones, y las revoluciones han sido parte de estas transformaciones, a lo largo de su historia se cuentan a tres como las más importantes. 1789, 1830 y 1848 son fechas que marcaron la historia francesa y también su cambio de régimen.
Ahora, recordaremos la Revolución de Julio, un evento histórico que marcó a Francia por las consecuencias que significó este suceso, iniciada el 27 de julio de 1830 y culminada el 29 de julio del mismo año, también conocida como Las Tres Gloriosas Jornadas Revolucionarias de París, la cual fue una revuelta de las clases medias y populares contra el rey y su gobierno autocrático.
Pero, ¿porque estalló esta revolución?
Al subir Carlos X al trono el 16 de septiembre de 1824, Francia estaba regida según los principios de la Carta de 1814, firmada por su antecesor, su hermano Luis XVIII. Los gobiernos monárquicos de los dos últimos Borbones se caracterizaron por intentar restablecer una monarquía con tendencias absolutistas y limitar el ya de por sí reducido poder de las cámaras. Según avanzaba el reinado de Carlos X, el pueblo veía casi imposible que se aprobaran unas necesarias reformas políticas y que se garantizaran los derechos civiles.
Después de las elecciones a la Cámara Baja de julio de 1830, Carlos X se enfrentaba a una mayoría liberal moderada. Para afrontar ese obstáculo, decidió disolver la recién elegida Cámara de diputados, y decretó el 25 de julio a las 4 ordenanzas de julio, esperando así poder reconstituir una mayoría parlamentaria que le fuese más favorable. Las ordenanzas (decretos) suspendían la libertad de prensa, alargaban el cargo de los diputados reduciendo su número y limitaban el derecho de voto.
Estas ordenanzas fueron publicadas en el boletín oficial de Francia El Monitour el 26 de julio de 1830, y esta acción del monarca Carlos X, provocó una turba iracunda en París que se manifestó en los jardines del Palais-Royal (un lugar simbólico desde la Revolución francesa). Los gritos de “¡Abajo los Borbones!” y “Viva la Constitución” se sucedieron. Esa misma noche, la policía cerró los jardines del Palais Royal, y la muchedumbre, furiosa, se reunió en las calles adyacentes, dando comienzo a los disturbios.
La mañana del 27 de julio la policía clausuró los periódicos que continuaban publicando; cuando la noticia llegó a la muchedumbre, esta tomó de nuevo los jardines del Palais Royal y Carlos X temeroso a la muchedumbre y a las acciones que pudieran llevar a cabo, ordenó a los soldados que disolvieran los disturbios, sin embargo, los disturbios aumentaron y culminaron con la abdicación del rey Carlos X y su posterior exilio, asi como el ascenso a la corona francesa de Luis Felipe de Orleans bajo el nombre de Luis Felipe I y el seudónimo de El Rey de los Franceses.
Tonatiuh León García Cortés.